La Bruja del panteón

Cuenta la leyenda que en Ocotlan de Morelos vivía una señora muy blanca y joven con cabello muy hermoso, su cabello era largo y negro, pero por su cabello tan largo no se le veía el rostro, pero todos los del pueblo decían que era un bruja. La bruja utilizaba ropa que le cubría todo el cuerpo, una falda larga y un reboso negro.
Todas las noches veían que la bruja iba y se paraba enfrente del panteón a visitar un árbol muy grande y verde, con un jardín a su alrededor.
Un día los habitantes de Ocotlan de Morelos se reunieron a hablar sobre la bruja, decidieron que la matarían por que ya no querían que les hicieran maldades.
Los habitantes agarraron sus antorchas, palos, machetes y cualquier tipo de armas, cuando llegaron vieron que en el panteón ya estaba la bruja, unos la agarraron y la quemaron junto al árbol que estaba en la entrada del panteón.
Y desde entonces se dice que la bruja se aparece a media noche en el árbol que esta en la entrada del panteón y que el árbol siempre permanece verde.

El Niño que logro ser Futbolista

Había una vez un niño llamado Cristian que vivía en una casa cerca del mar, a el le gusta jugar mucho fútbol, su sueño era ser futbolista profesional, siempre salia a jugar por las tardes  con sus amigos en la playa, era un niño muy paciente con sus amigos que no sabían jugar fútbol les enseñaba como tocar, mover la pelota hasta como meter goles, aunque uno de sus amigos quería ser el mejor le daba mucha envidia que el supiera jugar mas bien. un día su amigo cegado por la envidia le cometió una falta y Cristian se lastimo fuertemente la pierna, se puso a llorar por que sabia que si no se recuperaba jamas podría jugar mas fútbol.
Cuando llego a casa les contó a sus padres llorando lo que le había pasado, sus papas lo llevaron al medico a ver lo que le pasaba, el medico les dijo que no era un problema grave, solo que no tenia que jugar por algunos meses, cuando regresaron a su casa Cristian se acostó en su cama a pensar como iba a hacer posible su sueño.
Pasaron algunos años y Cristian ya tenia 16 años, sus padres lo mandaron a una escuela de fútbol, cuando llego a la escuela, le dijeron que iban a ver lo que sabia, el entreno con sus compañeros y les mostró lo que sabia, los entrenadores se emocionaron al ver las cualidades de cristian, paso el tiempo el seguía entrenando un día el entrenador le dijo que iba  a jugar en el partido, el se emociono, les llamo a sus papas y les contó que iba a jugar sus padres se emocionaron, llego el día del partido, y cuando inicio el partido el sintió como se sentía estar en un campo de fútbol, puso todo su esfuerzo y metió dos goles dedicados a sus papas y desde entonces demostró que no hay imposible para cumplir sus sueños, fue el mejor jugador del mundo, tiempo después conoció a una chava muy hermosa, después se casaron y tuvieron hijos y vivieron felices por siempre.

La Carreta de la Muerte

Cuenta la leyenda que en aquellos tiempos en Ocotlan de Morelos Oaxaca, carecía de alumbrado y estaba a oscuras en algunas partes.
Una noche que el presidente Adolfo Lopez Mateos inauguro la luz de temascal, por el rumbo del convento, por la Avenida Morelos y por el templo de Santo Domingo de Guzmán, comenzó a hablarse por el barrio entre las gentes de buena fe y timoradas, de que un espanto solía aparecer por el convento, decían las monjas que cuando pasaban algunas noches haciendo vela por penitencia, un chirrido como el de una pesada carreta que pasara sobre el empedrado de la angosta calle, otra señora llamada Cleotilda, vieja santurrona, juraba haberse asomado a su ventana para contemplar que era.
Horrorizada antes de caer desmayada, sus hijos certificaron que se trataba de una carreta cubierta hasta lo alto con negros crespones, que era arrastrada por caballos negros y conducida por la mismísima muerte cubierta por blanco vestuario.
También otras personas decían que siendo las 12 de la media noche, se escuchaba el cabalgar de un caballo, un día una señora quiso averiguar que era o quien era, al salir vio una carreta con caballos de color negro, tenían unos grandes ojos y sobre la carreta una persona que les pegaba con un látigo, vio que era la muerte y cayo desmayada, después ella les contó a sus familiares lo que había visto, nadie le creía lo que había pasado, pero al tercer día aquella señora murió sin explicación alguna, apareció con marcas en todo el cuerpo, la ropa desgarrada como si hubiera sido arrastrada por largos caminos.
Al ver esto toda la gente empezó a decir que lo que les había contado era cierto, y empezaron a murmurar que era la carreta de la muerte.
Desde entonces todas las noches se oye el ruido de los caballos jalando la carreta y como si trajera algo en ella, nunca nadie a querido salir a ver por el miedo de que se los pueda llevar.

 

El Cerdito Soñador

Había una vez un cerdito soñador que vivía en una casita en medio del bosque, rodeado de libros y fantasía, pero no tenia amigos. Todos le daban la espalda por que siempre se la pasaba contando historias imaginarias sobre hazañas caballerescas, aventuras submarinas y expediciones extraterrestres.
Siempre estaba inventando historias como si las hubiera vivido de verdad, hasta que sus amigos se cansaron de escuchar sus historias y acabo quedándose solo.
Al principio el cerdito se sintió muy triste y empezó a pensar que sus historias eran muy aburridas y por eso nadie las quería escuchar, pero a pesar de eso continuo escribiendo. 
Las historias del cerdito eran increíbles y le permitían vivir todo tipo de aventuras, se imaginaba vestido de caballero salvando a inocentes y hermosas princesas, también se imaginaba el agua fría del mar sobre su traje buzo mientras exploraba las profundidades del océano.
Un día mientras el cerdito leía su ultimo relato, paso por ahí una hermosa cerdita que parecía perdida, pero el cerdito estaba muy entusiasmado con su historia que ni se entero que alguien lo escuchaba, cuando acabo de leer la cerdita le aplaudió con gran entusiasmo.
El dijo vaya no sabia que tenia publico, le pregunto ¿Te a gustado mi historia?
Ella respondió es muy interesante, ella le dijo que si sabia mas historias , el le respondió entusiasmado claro yo mismo las escribo.
El le dijo que si quería el le ayudaba a escribir historias emocionantes, la cerdita dijo claro, entonces el le dijo que escribiera lo que se imaginara, la cerdita empezó a imaginarse que era una hermosa princesa, cuando acabo el cerdito la invito a comer a su casa, la cerdita acepto y se empezaron a hacer amigos, todas las tardes iba la cerdita a su casa y el cerdito jamas volvió a estar solo. 

El Cerro Encantado

Cuenta la leyenda que hace mucho tiempo, un señor llamado Crispín cuidaba sus animales cerca de un cerro todos los días, un día el señor se fue con sus animales, cuando llego al cerro se sentó a cuidar, entonces empezó a llover, el señor vio que había una cueva cerca de donde estaba, se metió a la cueva, cuando entro se dio cuenta de que había muchas flores, al señor le dio curiosidad, entonces comenzó a cortarlas para llevárselas a su esposa, mientras mas avanzaba mas flores encontraba, cuando se dio cuenta no encontraba la salida por mas que buscaba, su esposa muy preocupada por que no llegaba su esposo, decidió ir a decirle al sacerdote que su esposo no había llegado desde que se fue a cuidar a sus animales, entonces el sacerdote y la señora se dirigieron al cerro, cuando llegaron vieron huellas de su huarache siguieron las huellas hasta la cueva, cuando llegaron a la cueva el sacerdote le dijo a la mujer que se quedara afuera, el se metió y cuando entro se dio cuenta de que esas flores eran muy encantadoras, paso mucho tiempo y la señora se preocupo, regreso al pueblo a pedir ayuda a los vecinos, ellos decidieron ayudarla, cuando llegaron al cerro se metieron todos también la señora, y vieron las flores tan hermosas pero ellos empezaron a buscar y no encontraban nada, cuando se disponían a regresar no sabían por donde, el sacerdote que seguía buscando por fin encontró la salida pero salio al otro lado del cerro y se cerro aquella cueva, el sacerdote regreso al pueblo y empezó a contar lo que había pasado, por eso todos los que cuidan sus animales cuando empieza a llover mejor deciden regresar a casa por el temor de perderse en aquella cueva.